La artista china Linling Lu pone color y forma a la música de Philip Glass

A view of Linling Lu: Soundwaves, on view at the Phillips Collection in Washington, D.C.

Linling Lou. Soundwaves (2023). Phillips Collection, Washington DC. Foto: Lee Stalsworth

La música fue la principal fuente de inspiración para la artista china Linling Lu (1983), quien primero se formó como pianista clásica cuando era niña en su país natal y, más tarde, se dedicó, a la pintura. En 2006, se mudó a Estados Unidos, a Baltimore, Maryland, donde hoy vive y trabaja, para estudiar en el Maryland Institute College of Art. La exposición Soundwaves, celebrada en la Phillips Collection de Washington DC, ha reunido sus pinturas abstractas con formas de anillos concéntricos de colores brillantes y palpitantes. Estos lienzos circulares (tondos en términos del arte renacentista) varían en escala, se nos presentan en tamaños pequeños, medianos y grandes, tienen unas cualidades hipnóticas; aunque repetitivos, son asombrosamente vívidos y dinámicos y, a su vez, pueden llevarnos a la introspección. Algunos tondos pecan de chillones y tienden a ser decorativos, ideales para posters. Su objetivo es poner color y forma a la música, quieren ser un equivalente pictórico a tonos y melodías. De hecho, estas pinturas de Lu están inspiradas en Philip Glass, el compositor y pianista norteamericano que nació en Baltimore (1936), la ciudad adoptiva de Linglin Lu (y la mía). A través de Soundwaves Lu espera mantener abiertos los canales entre la pintura y la música, tal como dijo el día de la inauguración de la exposición. En la sala donde se exhibían las pinturas, se podía escanear un código con la interpretación del Etude n.16 de Philip Glass interpretado al piano por Timo Andres y así contemplar las pinturas de Lu escuchándole. He aquí el enlace:

https://www.phillipscollection.org/event/2023-02-09-intersections-linling-lu

La intención de la artista era que se visualizara el sonido de sus“ondas sonoras” (Soundwaves) en una configuración espacial dominada por el color y la forma geométrica del círculo. Sus anillos de color concéntricos giran alrededor de un núcleo central de un solo tono, a veces pequeño, a veces ocupa casi toda la superficie. De hecho, estas pinturas circulares a primera vista recuerdan a los antiguos discos de vinilo. Pintadas a mano, Lu no usa una cinta para definir los bordes, en su lugar, los mapea usando un compás grande con minas de lápiz de 0,3 mm, las mejores disponibles para dibujar. Entonces, pinta meticulosamente agregando varias capas hasta que el color y la opacidad son de su agrado. “Hacer ajustes de color en el proceso de pintar es como afinar un instrumento”, ha declarado. La sutileza de la interpretación de Timo Andres del Etude n.16 de Philip Glass propició que Lu a suavizara los bordes duros de sus pinturas al agregar un velo de grises suaves a la paleta general.

Installation image of Linling Lu: Soundwaves with three colorful circle canvases

Linling Lou. Soundwaves (2023). Phillips Collection, Washington DC: Foto: PC

Reconocido por su enfoque minimalista de la música, o “música de estructura repetitiva”, según sus propias palabras, Philip Glass compuso 20 etudes entre 1991 y 2012, principalmente como estudios de teclado. Mientras que en los primeros 10 exploró el tempo, la textura y la técnica, los segundos 10 se basaron en la armonía y la estructura:

Philip Glass. The Complete Etudes, Book 1. Anton Batagov, piano: https://www.youtube.com/watch?v=rwqyiTNpo2A

Philip Glass. The Complete Etudes, Book 2. Anton Batagov, piano: https://www.youtube.com/watch?v=Z7ZikDZlE_s

En el mismo sentido, las pinturas de Lu tratan sobre la armonía formal y la claridad. Traduce las notas y los acordes repetitivos de la música de Glass a un espacio físico: las siete notas tocadas en el piano por la mano izquierda estaban representadas por siete pinturas en el lado izquierdo de la sala, y las cinco notas tocadas por la mano derecha estaban representadas por cinco pinturas en el lado derecho de la sala. “La pintura más oscura, parecida a un eclipse solar, en un extremo de la sala se enfrenta al grupo colorido y conmovedor del otro extremo, con un tono azul que se entrelaza de principio a fin”, explica la artista. En este arreglo especial, “las emociones de la música se transmiten a través de los colores de las pinturas, convirtiéndose cada pintura en un instrumento, una fuente de sonido que materializa la calidad poética de la música”. De vez en cuando, hace girar los anillos alrededor de grandes núcleos que dominan la composición. El anillo exterior suele tener un tono claro, por lo que el borde de la imagen parece estar en transición hacia el blanco de la pared que lo rodea y, por lo tanto, en sentido figurado, se extiende hacia el exterior. Una de las dos piezas más grandes, tiene un centro tan vasto y vívido que tienes la sensación que te engulle.

Digital Rendering of Linling Lu Soundwaves installation consisting of five circular canvases with colorful concentric rings

Linling Lou. Soundwaves, (2023). Phillips Collection, Washington DC. Foto: PC

“La música de Glass y la pintura de Lu comparten rigor, pero también algo atmosférico y de ensueño”, lo definen en la Phillips Collection. En palabras de Linling Lu:”El esquema de colores de las pinturas se corresponde imaginativamente con el ritmo y los sonidos de la música”, sin embargo no debe tomarse como “una traducción literal de la música”, sino más bien como una forma de evocar sus “sentimientos, recuerdos e imaginación”. Muchos de los colores que usa están extraídos de la naturaleza y de sus sueños. Lu realiza sus círculos de colores al igual que los etudes de Glass, que se construyen a partir de pequeños bloques cíclicos de música con ritmo repetitivo que crea melodía y movimiento. De hecho, Lu crea pensando en el sonido. Vistos desde lejos estos círculos parecen óculos y te desorientan, como ruedas o discos de vinilo que giran vertiginosamente. Vistos de cerca, este efecto se pierde, el lienzo se transforma en una segunda obra, donde se puede examinar el trabajo de las bandas de colores, cómo se desvanecen desde un borde exterior duro hacia un valor más suave y claro que siempre oculta la pincelada. Vesela Sretenovic, la directora del Contemporary Art Initiatives and Academic Affairs de la Phillips Collection, señala que su proceso es elaborado, comienza con estudios digitales de composición y espectros de color, luego estira sus lienzos, dibuja los círculos concéntricos con lápiz y aplica capas de acrílico, unas con fluido dorado y otras con raros pigmentos para lograr superficies luminosas y radiantes. “La ejecución meticulosa, la precisión y la poesía se fusionan aquí, produciendo obras que desprenden sencillez y naturalidad. Al igual que los etudes, que se construyen a partir de pequeños bloques cíclicos de música con ritmo repetitivo, la pintura de Lu está hecha con bandas de colores circulares repetitivas dispuestas en varios intervalos”.

Exhibition view from LINLING LU Solo Exhibition at HEMPHILL Artworks, Washington DC (April 4 - August 28, 2020) Paintings from left to right: One Hundred Melodies of Solitude, No.173, No.99, No.174 and No.147 Photographed by Ulf Wallin  Image Courtesy of HEMPHILL Artworks

Linling Lou. Musical Meditations (2022). Kalamazoo Institute of Art. Kalamazoo, Michigan

La forma redonda, el círculo, es el protagonista absoluto de sus pinturas. Es el corazón de las pinturas. El motivo de la circularidad tiene un fuerte significado simbólico. El círculo es bidimensional y cuando se traslada a la tercera dimensión tenemos la esfera. Se considera la forma geométrica más perfecta porque tiene su configuración en el sol, la tierra, los planetas… La cosmogonía descrita por Platón en el Timeo presenta el universo en forma de esfera: “El mundo fue redondeado en forma de esfera… porque era la forma más perfecta. El mundo quería girar sobre sí mismo, alrededor de un mismo punto, con un movimiento uniforme y circular… Formó un cielo circular que se mueve circularmente”. Los discos de vinilo dan vueltas y vueltas emitiendo música que Lu traduciría a la pintura. Todos los puntos se encuentran en el centro del círculo, sin principio ni fin. Entonces, este motivo tanto para Lu como para Glass simboliza el movimiento cíclico, la atemporalidad y el infinito. Contienen asimismo una especie de homogeneidad en la ausencia de distinción y división, que le permite simbolizar, además del tiempo, el cielo en sus relaciones con la tierra que tiene un movimiento circular inalterable. El círculo también simboliza el ojo que todo lo ve.

Chinese Moon Gate. National Bonsai and Penjing Museum at the National Arboretum, Washington DC. Foto: Jonathan Cohen

Cuando se le pregunta cómo llegó a pintar círculos, Lu responde: “El círculo me encontró”. Durante sus estudios de arquitectura del paisaje en Pekín, se dio cuenta de que las Puertas de la Luna de los jardines chinos tradicionales son “transiciones de dos mundos”.  Se trata de unas puertas circulares en forma de luna, que dan paso a un jardín (imagen superior). Cruzar el círculo focaliza la atención y ofrece una entrada muy íntima, a escala humana, a un jardín que busca esta sensación de simplicidad armoniosa tan típicamente oriental, además de enmarcar la vista. También se cree que una Puerta de la Luna ofrece buenos augurios a quienes la atraviesan. La alusión a la luna tiene muchos significados. Hay un viejo adagio chino que dice que las flores florecen más bellas bajo la luna llena, entonces se distribuyen las flores de manera que a la luz de la luna se vislumbren mejor, ocurre con los de pétalos blanco que recrean su reflejo. Entonces, Lu se sintió atraída por esta idea del círculo de las Puertas de la Luna que sugiere “significados misteriosos sobre el tiempo y el espacio”, según sus palabras.

Linling Lu. One Hundred Melodies of Solitude (2020). Hemphill Fine Arts, Washington DC. Foto: Ulf Wallin

Contemplando las pinturas de Lu y escuchando la música de Glass se pueden sentir pulsiones emocionales, ondas sonoras que van de la calma, a la nostalgia, a la alegría, a la soledad, al miedo, quizás vértigo… dependiendo de como cada uno/a lo percibe, pero ciertamente hay una firme sensación de orden. Vesela Stretenovic cree que esta estructura armoniosa recuerda los escritos del historiador del arte E.H. Gombrich, en particular The sense of Order (1979), en el que considera el patrón (a través de la repetición) como un medio para ordenar el universo. Efectivamente, la humanidad ha creado patrones desde sus orígenes utilizando motivos geométricos para decorar paredes, cuencos, textiles… Sucesión rítmica de puntos y líneas que se alargan y acortan, se entrelazan y se reproducen hasta el infinito; todo está en movimiento; todo dispuesto en perfectas simetrías. Tal vez necesitemos estructuras geométricas para sentirnos seguros y estables en nuestra vida. Entonces la mirada y el oído pueden sentirse atraídos por la serenidad que transmite el orden geométrico sea musical, pictórico, arquitectónico o un simple papel pintado decorativo.

Artist Linling Lu works in her studio in Baltimore, MD, surrounded by several of her colorful paintings of concentric circles. Lu, seated in front of a very large pink canvas, is wearing headphones. There are many bottles of colorful paint in the foreground.

Linling Lu en su esudio de Baltimore, Maryland, rodeada de las pinturas de la serie One Hundred Melodies of Solitude. Foto: Xiaoming Liu

Linling Lu nació en 1983 en Zunyi, provincia de Guizhou, una parte montañosa de China. Su padre es un hábil intérprete de ehru, un instrumento tradicional de dos cuerdas, y a su madre le gusta cantar. Lu estudió arquitectura paisajista en la Universidad Forestal de Pekín, en lo que describe como un compromiso con sus padres. Estaba interesada en estudiar arte y pintura, y su especialización le permitió tomar clases de dibujo arquitectónico y acuarela. En 2006, se mudó a Baltimore, Maryland, donde estudió arte en el Maryland Institute College of Art. Además de sus coloridas pinturas circulares, otros trabajos de Lu incluyen pequeñas esculturas de madera entrelazadas, así como collages que incorporan textiles debido a que pasó parte de su juventud viviendo con su abuela costurera que le inspiró el trabajo de de rayas curvilíneas de los textiles chinos tradicionales. Su trabajo se ha presentado en numerosas exposiciones: Towson University’s Center for the Arts (2018), Kohl Gallery at Washington College (2019), The Delaware Contemporary (2021), Katzen Arts Center at American University (2022), and Kalamazoo Institute of Arts (2022). El trabajo de Lu se encuentra en las colecciones privadas de Microsoft Art, Louis Vuitton, City Center DC y en la Embajada de los Estados Unidos en Pekín.

Kenneth Noland. Beginning (1958). Hirshhorn Museum, Washington DC. Foto: Smithsonian

En cuanto a su estilo, los colores vibrantes de las abstracciones de Lu recuerdan las obras de los pintores de la Washington Color School y del movimiento Color Field, especialmente Kenneth Noland (1924-2010), del que casi se puede decir que Lu copia aunque este sea más expresivo y no tan rígido. Noland fue uno de los pintores que ayudó a establecer Color Field como un nuevo movimiento importante en el arte contemporáneo de la década de 1960. Lu ha recibido influencias también de Paul Reed, Moira Dreyer o Arthur Dove, así como del Op-Art y de los paisajes que incorporan soles ardientes de Georgia O’Keeffe (pintora que ella adora). En el arte contemporáneo europeo del siglo XX también han trabajado este tipo de formas circulares Robert y Sonia Delaunay que seguro que ella conoce. Aunque también pueden recordar un mandala. En todo caso, las pinturas de Lu vinculadas a Philip Glass tienen sentido, pero tampoco es que aporten nada nuevo actualmente, si no es una manera particular de trabajar la forma geométrica del círculo. Cuando era niña, recuerda que miraba a través de su ventana los atardeceres casi todos los días, “solo mirando el color y las nubes”. Hacía largas caminatas por el campo de donde guarda unos recuerdos de la naturaleza que continúan conformando la paleta que usa en sus pinturas. Asimismo, Stretenovic destaca que los modelos circulares repetitivos y las superficies suaves resuenan con la precisión musical de Bach y Vivaldi y las melodías poéticas de Chopin.

File:20.IX Book of Longing.jpg

Philip Glass: Foto: Wiki

Philip Glass es un innovador compositor. Estudió flauta cuando era niño y se inscribió a los 15 años en la Universidad de Chicago, donde estudió matemáticas y filosofía graduándose en 1956. Su interés por la música atonal lo llevó a estudiar composición en la Juilliard School of Music en Nueva York y luego a París con Nadia Boulanger, ciudad donde se relacionó con sitarista indio Ravi Shankar que influyó decisivamente en su estilo compositivo; temporalmente descartó cualidades formales tradicionales como la armonía, el tempo y la melodía en su música. Su obra consiste en una serie de ritmos sincopados ingeniosamente contraídos o prolongados dentro de una estructura diatónica estable. Está catalogado como un músico minimalista. A lo largo de su carrera, Glass ha colaborado con muchos músicos que representan diversas tradiciones. También han compuesto bandas sonoras cinematográficas de importantes películas como The Truman Show (1998), The Hours (2002) o Notes on a Scandal (2006):

Truman sleeps: https://www.youtube.com/watch?v=vLY0DiMQi2c

"One Hundred Melodies of Solitude No. 122," by Linling Lu (2017)

Linling Lu. One Hundred Melodies of Solitude No. 122. (2017). Foto: Washington City Paper

Las 12 pinturas que Linling Lu ha presentado en Soundwaves son parte de su serie en curso de 250 piezas One Hundred Melodies of Solitude  (Cien melodías de soledad) que comenzó en 2010 inspirada principalmente en Bach y Chopin, sus compositores favoritos. Además, son una alusión a la novela de Gabriel García Márquez Cien años de soledad y, a su vez, a la propia vida de Lu. El día de la inauguración de la exposición, la artista explicó que a menudo se sentía sola como hija única que es y luego experimentó el aislamiento como nueva residente en Estados Unidos con dominio limitado del inglés. Al no hablar inglés, en sus primeros años en Baltimore no solo se contentaba con escuchar a la gente sino el canto de los pájaros y el susurro de las hojas. Ciertamente, en la ciudad hay muchos pájaros, tanto en el puerto como en los parques y muchos árboles en las calles de la ciudad. Mientras pintaba en Baltimore, Lu se dio cuenta de que estaba meditando sobre su aislamiento, que dice que “fue muy, muy útil” sin el apoyo cercano de amigos y familiares. De esta serie, sacó siete piezas y creó cinco nuevas específicamente para la exposición de la Phillips Collection. Trabajar en la serie le permitió a Lu sumergirse en un estado meditativo y reconectarse consigo misma a través del color y el sonido. “Estaba pensando en los dedos bailando sobre el teclado y las pinturas en el espacio”.

Entrevista con Linling Lou sobre Soundwaves:

https://www.phillipscollection.org/event/2023-02-09-intersections-linling-lu

Àngels Ferrer i Ballester

Post dedicado a mi ciudad adoptiva, Baltimore, y a Washington DC, que me han aportado y me aportan tanto. Y a Philip Glass y a su minimalista piano que a veces escucho por estos parajes y te deja sin palabras, solo emoción en su orden geométrico: https://www.youtube.com/watch?v=6Stu7h7Qup8